Este año, tras las lluvias de invierno, el Desierto de Atacama nos sorprende con un desierto florido en su máximo esplendor. Colores cubren la pampa y transforman el paisaje del norte de Chile.
Desde Ferronor, nuestros trenes tienen el privilegio de recorrer este espectáculo natural y acercar a las personas y a la industria a través de una conectividad segura y eficiente.
Sabemos que es un fenómeno que ocurre solo cada ciertos años. Cuidemos juntos este tesoro del desierto.








